19 de junio de 2025
La Justicia consideró que la sanción fue desproporcionada, ya que la empresa no aplicó advertencias previas ni sanciones menores, y el hábito era común dentro del establecimiento.
Un trabajador despedido por tomar mate en su lugar de trabajo durante la pandemia será indemnizado por decisión de la Justicia de Río Negro, que consideró que la medida fue "desproporcionada" y sin causa justificada.
El hombre se desempeñaba como repartidor en una panadería desde 2017. En julio de 2020, durante la pandemia, firmó una notificación que prohibía el consumo de mate dentro del local por razones sanitarias, como parte del protocolo contra el COVID-19. Sin embargo, semanas después, el dueño lo filmó tomando mate en el sector de elaboración, compartiéndolo con un compañero y apoyando el recipiente sobre las superficies de trabajo.
La empresa alegó que el hábito implicaba un riesgo sanitario, por el flujo de saliva y por restos de yerba que podían caer sobre la masa cruda. En octubre, lo despidió alegando "pérdida de confianza".
Durante el juicio, se demostró que el consumo de mate era una práctica común en el local, que el trabajador no tenía antecedentes disciplinarios y que la empresa no aplicó sanciones previas. El tribunal remarcó la ausencia del principio de progresividad en la sanción y falló a favor del empleado.
La panadería deberá pagarle una indemnización de $207.632,91, que incluye compensación por antigüedad, preaviso, días trabajados, SAC proporcional, vacaciones no gozadas y la entrega de certificados laborales.
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