CEPO AL SALARIO. Suboficiales de las Fuerzas Armadas contra Petri por el congelamiento salarial: "No es una decisión técnica, es una crueldad"

La Asociación de Suboficiales Argentinos de las Fuerzas Armadas y de Seguridad (ASUBA) lanzó una contundente carta pública dirigida al ministro de Defensa, Luis Petri, para denunciar la crítica situación que atraviesan los suboficiales en actividad y retirados, tanto por los bajos salarios como por el colapso del Instituto de Obra Social de las Fuerzas Armadas y de Seguridad (IOSFA). El documento, difundido este jueves, refleja el creciente malestar dentro de las Fuerzas Armadas y acusa al Gobierno de perpetuar una "injusticia histórica" al dilatar soluciones estructurales.

Salarios insuficientes y desigualdad

ASUBA expresó su "profunda indignación" ante la postergación de la equiparación salarial con las otras fuerzas de seguridad nacionales, que según Petri se concretará recién al final del mandato del presidente Javier Milei. Para la asociación, esta demora no es una decisión técnica, sino un acto de "crueldad" que agrava la precaria situación económica de miles de efectivos, especialmente los suboficiales de menor rango. Según denuncia la carta, muchos perciben sueldos por debajo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, insuficientes para cubrir necesidades básicas como alquiler, alimentación o medicamentos.

"Si realmente se pretende "reivindicar a las Fuerzas Armadas" como dice, debe empezar por lo básico: asegurar su bienestar integral, no solo anunciar compras de armamento",

El reclamo también apunta a la disparidad salarial con las fuerzas federales de seguridad, como la Policía Federal Argentina (PFA), Gendarmería y Prefectura Naval. Según ASUBA, un suboficial de las Fuerzas Armadas cobra entre un 25% y un 40% menos que sus pares en estas fuerzas, pese a enfrentar riesgos y responsabilidades similares. "¿Qué justifica que dos servidores públicos, con igual vocación y antigüedad, cobren distinto por el color del uniforme?", cuestiona la carta, denunciando una "clara discriminación por jurisdicción ministerial" entre los ministerios de Defensa y Seguridad.

La equiparación con las otras fuerzas de seguridad había sido iniciada durante el gobierno de Alberto Fernández, pero hoy se encuentra totalmente aplazada. Hoy el malestar se apodera de los militares, a pesar de los anuncios grandilocuentes. "Si realmente se pretende "reivindicar a las Fuerzas Armadas" como dice, debe empezar por lo básico: asegurar su bienestar integral, no solo anunciar compras de armamento", sostiene el documeto de ASUBA.

El colapso del IOSFA: un sistema al borde del abismo

El deterioro del IOSFA, que asiste a más de 500.000 afiliados en todo el país, es otro de los ejes del reclamo. La obra social enfrenta una deuda superior a los $120.000 millones, lo que ha derivado en la interrupción de convenios con clínicas, la escasez de profesionales en varias provincias, demoras en la entrega de medicamentos y la suspensión de tratamientos esenciales. "En algunas provincias, IOSFA directamente ha desaparecido", advierte ASUBA, destacando que los afiliados con enfermedades graves no acceden a atención médica, terapias, estudios ni internaciones.

Hace tan solo unas semanas, el propio titular de IOSFA (nombrado por Petri en el cargo) había reconocido que parte de la crisis de la obra social tiene que ver con los salarios "paupérrimos", lo que desfinancia a la obra social de los militares.

Ultimátum para Petri

La carta de ASUBA concluye con un mensaje directo a Petri: "Tiene la oportunidad de ser recordado como el ministro que corrigió una injusticia histórica, o como otro que miró para otro lado". La asociación promete continuar elevando su voz a través de canales institucionales para defender los derechos de sus representados, dejando en claro que el malestar en las Fuerzas Armadas se profundiza y que las decisiones del Gobierno están bajo escrutinio.