4 de diciembre de 2025
El dirigente de Ate Córdoba sostuvo además que la reforma de Milei implica retroceder 100 años en materia de derechos laborales.
Desde el País Vasco, donde participa de una agenda de incidencia internacional en la organización Martin Etxea, Federico Giuliani trazó un diagnóstico contundente sobre la situación laboral argentina. En diálogo con La Hora de las Villas y los Barrios, programa emitido por FM La Ranchada de Córdoba, el dirigente de ATE y la CTA Autónoma advirtió que "la Argentina ya está transitando una reforma laboral de hecho", caracterizada por pérdida de salario, mayor precarización, pluriempleo y condiciones de trabajo degradadas.
Según Giuliani, el Gobierno de Javier Milei busca ahora darle un marco legal a ese escenario mediante una reforma que, en su visión, apunta a desmantelar derechos que hoy representan un piso de protección para buena parte de la población ocupada. El paquete implica, afirma, un retroceso histórico: la posible eliminación de convenios colectivos, la desarticulación de las paritarias y la habilitación de jornadas de hasta 12 horas, a contramano de las tendencias globales que avanzan hacia la reducción del tiempo de trabajo. "La Reforma Laboral de Milei nos hará retroceder 100 años en términos de derechos", sostuvo.
"Lo que no se consiguió en las urnas debe construirse desde abajo. Hay que salir a hablar con los trabajadores, explicar el impacto de esta reforma y preparar una resistencia sostenida. La única lucha que se pierde es la que se abandona".
El dirigente también comparó el proyecto con la reforma laboral implementada en Brasil en 2017, señalando que aquella experiencia derivó en empleos más inestables, salarios más bajos y un debilitamiento generalizado del sistema de protección laboral. Para Giuliani, la propuesta argentina reproduce ese modelo y propicia un mercado laboral de mano de obra barata, con sindicatos debilitados y con restricciones al derecho de huelga y de asamblea. "Escrita en los escritorios de grandes estudios de abogados de corporaciones económicas yankis y sionistas -manifestó Giuliani-, tiene como fin principal generar mayor rentabilidad y ganancias para las patronales, resultando en peores condiciones de trabajo y salarios más bajos para los trabajadores. El plan es generar una mano de obra cuasi esclava y barata para que los capitalistas sigan acumulando riqueza",
El panorama, advierte, es aún más complejo si se considera que el 60% de la fuerza laboral ya se desempeña en la informalidad, sin cobertura legal, vacaciones pagas ni límites horarios claros. Con el debate legislativo previsto para febrero de 2026, tras el receso de verano, Giuliani llamó a multiplicar la organización territorial y sindical: "Lo que no se consiguió en las urnas debe construirse desde abajo. Hay que salir a hablar con los trabajadores, explicar el impacto de esta reforma y preparar una resistencia sostenida. La única lucha que se pierde es la que se abandona", concluyó.
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