REFORMA LABORAL . Jorge Sola advirtió que la CGT podría judicializar la reforma

Luego de la marcha masiva en rechazo a la reforma laboral impulsada por el Gobierno, Jorge Sola, integrante del triunvirato de conducción de la CGT, advirtió que la central obrera podría judicializar el proyecto y reclamó al Ejecutivo que "escuche a todos los sectores" antes de avanzar con el debate.

"Esta reforma tiene cosas que rozan la inconstitucionalidad y a la vuelta de la esquina se van a chocar contra la pared de nuevo", sostuvo el dirigente sindical en declaraciones radiales, al marcar los reparos legales que observa la CGT sobre la iniciativa oficial.

Sola también valoró la decisión del Gobierno de postergar hasta febrero el tratamiento del proyecto en el Congreso. "Debatir esto entre gallos y medianoche era un error y se tomó nota de ello", afirmó, al considerar necesario un debate más amplio y transparente.

"Esta reforma tiene cosas que rozan la inconstitucionalidad y a la vuelta de la esquina se van a chocar contra la pared de nuevo"

En ese sentido, destacó las gestiones realizadas por la central obrera para frenar el avance de la reforma. "Hubo un trabajo muy fuerte con gobernadores, senadores y senadoras para explicarle, desde la CGT, las consecuencias de la reforma laboral, que se la expresamos a (Patricia) Bullrich", señaló Sola, quien comparte la conducción de la CGT con Cristian Jerónimo y Octavio Argüello.

En contraposición a la mirada del presidente Javier Milei, el dirigente sostuvo que la reforma no tendrá impacto positivo en la creación de empleo y cuestionó los cambios en las reglas laborales. "Los cambios en las reglas" no son la solución, afirmó, y recordó que medidas ya implementadas por el Gobierno no lograron los resultados anunciados.

"El Presidente cambió tres aspectos de las relaciones laborales. Sacó las multas al empleo en negro, por lo que cualquiera que tuviera un empleado podría pasarlo a blanco sin penalidad. Creó la figura del trabajador independiente, lo que permitió que el dueño de un kiosco pudiera contratar a tres trabajadores sin relación de dependencia. Y, por último, estiró el período de prueba. Ninguna de esas cosas generó más trabajo", enumeró.

En la misma línea, agregó: "Se ha caído el trabajo; 200.000 empleos formales y 20.000 pymes menos en dos años", al describir el escenario actual del mercado laboral.

Sola también apuntó a la presión fiscal como uno de los principales obstáculos para el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas. Para abrir una pyme, explicó, "se te va el 40% en impuestos provinciales, nacionales y tasas", y remarcó: "Es ahí donde hay que buscar la diferencia".

Por último, volvió a cuestionar la visión presidencial sobre el empleo informal. "Los trabajadores en negro tienen derechos, pero no los pueden ejercer", afirmó, y concluyó que los cambios propuestos en la relación entre empleadores y trabajadores "no van a generar empleo, sino que lo va a hacer un proyecto de inversión".