SINDICATOS. La abogacía del Estado se prepara para su gran noche: el evento federal que reúne a quienes sostienen la legalidad del país

El próximo 28 de noviembre, la abogacía pública de todo el país volverá a encontrarse en el Palacio Alsina, en lo que ya es considerado el evento más importante del año para la abogacía del Estado. La jornada, organizada por la Asociación Gremial de la Abogacía del Estado (AGAE), llega en un momento de alta sensibilidad institucional y con una agenda profesional que mira hacia el futuro.

El encuentro se desarrolla en el marco del Día de la Abogacía del Estado, que recuerda la creación de la Procuración del Tesoro de la Nación el 7 de noviembre de 1863, un hito que marcó el origen del servicio jurídico estatal en la Argentina. Aquella estructura fundacional dio forma al rol que, desde entonces, garantiza la legalidad de los actos de gobierno y la vigencia del Estado de derecho.

La AGAE representa a las abogadas y abogados que trabajan en los servicios jurídicos de los organismos centralizados, descentralizados y autárquicos de la Administración Pública Nacional. Son los profesionales que -lejos de los reflectores- traducen decisiones políticas en actos jurídicos válidos, resguardan la legalidad, marcan límites técnicos y sostienen el funcionamiento institucional incluso en contextos adversos.

"Sin la labor silenciosa y profesional de esta comunidad, ningún Estado podría funcionar", es una de las ideas que atraviesa el espíritu de la celebración. La organización busca poner en primer plano ese aporte cotidiano, poco visible pero decisivo.

Un año complejo, una organización fortalecida.

El evento llega tras un año atravesado por cambios institucionales, tensiones presupuestarias y debates sobre el rol del Estado. Aun así, la AGAE destaca que la complejidad del contexto no frenó el trabajo, sino que lo profundizó.

En estos años se multiplicaron los convenios con universidades, se ampliaron espacios de formación y capacitación, y se modernizó la sede con áreas de coworking y herramientas adaptadas a una profesión que cambió aceleradamente desde la pandemia. El crecimiento también fue territorial: la Asociación hoy se reconoce como una organización federal, con representación activa en todo el país.

En cada cambio de gobierno, la abogacía del Estado cumple un rol que trasciende coyunturas: garantiza continuidad institucional. Con 40 años de democracia como respaldo, el cuerpo profesional mantiene una línea constante basada en la ética, la formación y la independencia técnica. Ese estándar -sostienen desde la entidad- es lo que permite que cualquier administración encuentre un cuerpo jurídico sólido, preparado y respetado en todos los organismos.

Rubén Ramos, Secretario General de la Asociación Gremial de la Abogacía del Estado, planteó al respecto a Identidad Sindical que, "En cada organismo hay colegas que trabajan con una responsabilidad enorme. Son quienes dan coherencia jurídica a las decisiones públicas y quienes aseguran que los límites y las garantías constitucionales se cumplan. Ese compromiso merece ser reconocido. La abogacía del Estado sostiene cada día el andamiaje jurídico del país. Nuestra tarea no es visible, pero es decisiva: garantizamos que el Estado funcione conforme a la Constitución y en defensa del interés público."

De todas maneras, el sector enfrenta dificultades que ya forman parte de un diagnóstico compartido: salarios rezagados, pluriempleo creciente, ausencia de concursos regulares y la necesidad de avanzar hacia un escalafón propio.

"En cada organismo hay colegas que trabajan con una responsabilidad enorme. Son quienes dan coherencia jurídica a las decisiones públicas y quienes aseguran que los límites y las garantías constitucionales se cumplan".

En este sentido desde AGAE plantean que la respuesta no es la fragmentación, sino la organización. La agenda para el corto plazo incluye tres ejes: Jerarquización profesional; Recomposición salarial y Concursos transparentes y carrera técnica.

Más allá del clima festivo, la noche del 28 tendrá un sentido político-profesional claro: reafirmar el valor del servicio jurídico estatal y la necesidad de fortalecerlo.

El encuentro también funciona como un punto de reconocimiento entre colegas, una oportunidad para trazar agendas comunes y un espacio para proyectar el futuro de la profesión en un Estado que demanda cada vez más solidez técnica. El evento del 28 de noviembre buscará mostrar la magnitud, la diversidad y la potencia de una organización que, desde cada organismo, sostiene la arquitectura legal que hace posible la vida democrática de la Argentina.